Al menos siete personas fallecieron luego de que un avión de carga se estrellara la noche del martes en las cercanías del aeropuerto internacional de Cincinnati/Northern Kentucky, según informaron autoridades locales y la Administración Federal de Aviación (FAA).
La aeronave, un Boeing 727 perteneciente a la empresa Air Cargo Express, despegó de Chicago con destino a Atlanta, pero reportó fallas en el motor derecho pocos minutos antes de intentar un aterrizaje de emergencia. Testigos aseguraron que el avión perdió altura rápidamente y se precipitó sobre una zona boscosa, provocando un incendio de gran magnitud.
Equipos de bomberos y rescatistas trabajaron durante más de cinco horas para sofocar las llamas y recuperar los cuerpos de las víctimas, todas ellas miembros de la tripulación.
El portavoz del Departamento de Transporte de Estados Unidos, David Henderson, indicó que la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) se encuentra investigando las causas del siniestro, aunque no se descarta una falla mecánica combinada con error humano.
El accidente ha generado conmoción en el sector aeronáutico, pues se trata del tercer incidente aéreo grave registrado en Norteamérica en lo que va del año.


