“Desde ahora pasaré a llamarme doctor”, proclamó Charly García al recibir el título de doctor honoris causa de la Universidad de Buenos Aires, la única universidad latinoamericana en el top 100 mundial.
La solemnidad del acto no logró intimidar al icónico músico argentino, quien se comportó con la ironía, desfachatez y humor de siempre. Esta actitud refleja la personalidad de un artista que ha desafiado las convenciones y ha utilizado su voz y sus versos contra la injusticia, convirtiéndose en un símbolo de la cultura argentina y latinoamericana.
El decano de la Facultad de Filosofía y Letras, Ricardo Manetti, lo retrató con acierto al afirmar: “Charly es nuestra realidad, es la representación más real y concreta de toda la capacidad enorme que tenemos de creación”, en homenaje a su trayectoria y profunda conexión con el pueblo.
Nacido el 23 de octubre en Buenos Aires, Charly García ha cumplido 74 años. Se ha definido a sí mismo como un “genio” y ha reforzado su actitud irreverente y provocadora, que lo ha hecho destacar en un mundo musical cargado de normas. Diseñado por Dios y la naturaleza para no pasar desapercibido mide casi dos metros, lleva un bigote bicolor y una delgadez extrema, su reconocimiento trasciende la apariencia física.
En su emblemática canción Los dinosaurios , Charly muestra cómo el arte puede denunciar la represión y dignificar la memoria. Escrita durante la dictadura argentina (1976–1983), sus versos son una denuncia directa a la violencia del régimen y una expresión de esperanza: “los dinosaurios van a desaparecer”.
Con 74 años y un doctorado honoris causa , Charly reafirma su compromiso artístico y social. Representa la esencia de la resistencia cultural e inspira a otros a protestar contra la opresión y luchar por un futuro más justo.



