Si estás en Machupicchu Pueblo y buscas un lugar donde las noches cobren vida con sabor, música y buena vibra, Tortus Bar es esa joyita que no te puedes perder. Ubicado al costado del estadio —literal, súper fácil de encontrar— este bar se ha ganado el cariño tanto de locales como de viajeros de paso por su ambiente acogedor y su propuesta que lo tiene todo: buenos tragos, comida deliciosa y un espacio que invita a quedarse más tiempo del planeado.
Lo de Tortus es una experiencia nocturna. Solo abre por las noches, lo que lo convierte en el punto perfecto para cerrar un día de caminatas, aventuras y exploración por Machupicchu. Cuando cae el sol, las luces del bar se encienden y empieza lo bueno: música que anima, gente que llega con ganas de pasarla bien y un equipo que te recibe como en casa.
Uno de los puntos fuertes del lugar son sus tragos de autor. Sí, aquí no solo se sirven cocteles clásicos —que los preparan muy bien— sino también creaciones únicas, con ese toque especial que sorprende en cada sorbo. La carta es variada, y para los que aman aprovechar, siempre hay happy hours con promociones que valen totalmente la pena.
Pero no hay trago que se disfrute mejor que con algo rico para picar. Y en eso, Tortus también se luce. Sus piqueos son contundentes y sabrosos, perfectos para compartir entre amigos. Tienen el balance justo entre sabor casero y presentación bien cuidada, de esos que uno termina recomendando apenas sale del lugar.
Y si quieres ver el ambiente por ti mismo antes de ir, dale un vistazo a su TikTok: @tortus19. Ahí vas a encontrar lo que realmente significa pasarla bien en Machupicchu Pueblo.
Ya lo sabes, si estás en la zona y quieres una noche distinta, divertida y con ese gustito especial que solo los lugares bien llevados tienen, Tortus Bar es tu punto de partida. Fácil de llegar, imposible de olvidar.